Chen Dong y Chen Zhongrui realizaron una caminata espacial de ocho horas el 22 de mayo de 2025 en la estación Tiangong, donde instalaron paneles de protección contra desechos espaciales en el exterior del módulo Tianhe, marcando la primera utilización de la esclusa de dicho módulo desde diciembre de 2022 y consolidando la autonomía de la CNSA en operaciones extravehiculares.
El pasado 22 de mayo de 2025, los taikonautas chinos Chen Dong y Chen Zhongrui efectuaron una caminata espacial de ocho horas en la estación espacial Tiangong, contribuyendo de manera significativa al mantenimiento y la protección de la infraestructura orbital china. Durante esta actividad extravehicular (EVA), ambos instalaron paneles de protección contra desechos espaciales en el exterior del módulo central Tianhe, inspeccionaron sistemas críticos y realizaron labores de mantenimiento que incluyen el ajuste de conectores y la comprobación de anclajes externos. Estas tareas son fundamentales para salvaguardar los sistemas de soporte vital y los elementos estructurales de la estación frente a la creciente amenaza de fragmentos orbitales.
Esta caminata representa la primera utilización de la esclusa de aire del módulo Tianhe desde que la estación entró en su fase de aplicación y desarrollo en diciembre de 2022, tras completarse su ensamblaje básico. El éxito del EVA se vio favorecido por la ayuda del brazo robótico de la estación, que facilitó el posicionamiento de los paneles de protección, y por el seguimiento en tiempo real del centro de control en tierra, que guió cada paso de los taikonautas para optimizar tiempos y minimizar riesgos.
Chen Dong, comandante de la misión Shenzhou-20, realizó su segunda caminata espacial tras haber acumulado experiencia en misiones anteriores, mientras que para Chen Zhongrui esta actividad marcó su primera EVA. Ambos regresaron al interior del módulo Tianhe sin contratiempos médicos ni técnicos, consolidando una nueva referencia en las capacidades extravehiculares de la Administración Espacial Nacional China (CNSA) y subrayando el avance continuo del programa tripulado chino.
La misión Shenzhou-20, lanzada el 24 de abril de 2025 desde el Centro de Lanzamiento de Jiuquan mediante un cohete Long March 2F, transporta a tres taikonautas: Chen Dong, Chen Zhongrui y Wang Jie, quienes permanecerán en órbita aproximadamente seis meses, hasta noviembre de 2025. Durante su estancia, realizarán diversos experimentos científicos, pruebas tecnológicas y actividades extravehiculares adicionales, además de recibir al menos un envío de carga a través de la nave Tianzhou-9, que incluirá suministros, combustible y repuestos para la estación.
Contexto y relevancia técnica
La estación Tiangong, con una masa aproximada de 100 toneladas y una configuración multimodular, opera en una órbita baja terrestre de 340 a 450 km de altitud, con una inclinación orbital de 42° a 43°. Su módulo central, Tianhe, fue lanzado en abril de 2021, seguido de dos módulos científicos en 2022, completando así la arquitectura básica de la estación. Tiangong está diseñada para sostener operaciones tripuladas durante 15 años, y gracias a su brazo robótico de alta precisión, puede ensamblar nuevos módulos y facilitar maniobras extravehiculares con mayor autonomía.
El aumento de basura espacial en la órbita baja terrestre constituye una de las amenazas más significativas para cualquier infraestructura orbital. Los fragmentos de cohetes desechados, satélites inactivos y residuos de misiones previas pueden impactar estructuras sensibles como paneles solares o conductos de transferencia de energía, provocando daños irreparables. Para mitigar este riesgo, los ingenieros de la CNSA diseñaron escudos compuestos de materiales avanzados con alta resistencia al impacto de micro-meteoritos y partículas orbitales. Dichos escudos, instalados durante la EVA, protegen principalmente las cintas de cableado, así como componentes críticos del sistema de propulsión y control de actitud del módulo Tianhe.
Space
Durante la caminata, los taikonautas tambien evaluaron el estado de las uniones modulables y verificaron las sondas térmicas externas que miden la temperatura de la estructura en diferentes puntos expuestos a la radiación solar. Estas inspecciones son esenciales para anticipar posibles deterioros o deformaciones que pudieran ocurrir por cambios térmicos y radiativos, asegurando el buen funcionamiento de sistemas de soporte vital y laboratorios científicos en su interior.
Perspectivas futuras
La Shenzhou-20 y sus caminatas espaciales marcan un paso esencial en la estrategia de China para consolidar Tiangong como el único laboratorio orbital permanente tras la retirada de la Estación Espacial Internacional (ISS) alrededor de 2030. China ha manifestado su interés en ampliar la colaboración internacional, invitando a científicos de diversas naciones a participar en experimentos a bordo. Además, se prevé que en los próximos años se integren nuevos módulos dedicados a estudios de microgravedad, biología y física de materiales, al tiempo que se desarrolle un segmento logístico para expedir satélites desde la estación.
En paralelo, la CNSA avanza en el desarrollo de trajes EVA más ligeros y resistentes, optimizados para permitir caminatas de hasta seis horas continuas, gracias a sistemas de soporte vital regenerativo y recirculación de oxígeno. Estos trajes incorporan tejidos compuestos que ofrecen protección térmica y contra micrometeoritos, permitiendo a los taikonautas operar con mayor destreza durante actividades extravehiculares complejas. Con la acumulación de experiencia en misiones Shenzhou y el perfeccionamiento del brazo robótico, China da pasos firmes hacia futuras misiones a la Luna, con la meta declarada de enviar un equipo tripulado antes de 2030 y establecer eventualmente una base lunar internacional.