Créditos: SpaceX
El pasado jueves 17 de noviembre, la empresa SpaceX tenía previsto lanzar desde la Base Vandenberg de la Fuerza Aérea Estadounidense un conjunto de satélites Startlink, denominado Grupo 2-4, para ubicarlos en su constelación en órbita baja (LEO) de conectividad satelital. Sin embargo, previo a la hora estimada de lanzamiento, la empresa anunció que postergaba el lanzamiento por un problema técnico, a raíz de una prueba de fuego estático realizada en uno de sus cohetes Falcon 9. En principio, la empresa anunció que el próximo lanzamiento de Starlink sería al día siguiente, el viernes 18 de noviembre, pero luego declaró que el lanzamiento se postergaba indefinidamente.
Starlink es la constelación de satélites de comunicación por internet desarrollada por SpaceX, que actualmente se encuentra disponible en ciertas regiones, como América del Norte y parte de Europa, y países como Australia, Japón, Brasil, Chile, entre otros. Se trata de una constelación de órbita terrestre baja (LEO) que se está desarrollando en etapas. La primera versión de la constelación consta de cinco capas orbitales. Si bien SpaceX logró una cobertura casi global, la primera versión de la constelación no estará completa hasta que se llenen las cinco capas previstas.
La misión que fue postergada el pasado jueves 17 de noviembre, Starlink Grupo 2-4, consiste en 52 satélites de aproximadamente 307 kg, destinados a la capa 2 de la constelación, a una altura de 570 km (órbita baja) con una inclinación de 70°. Esta capa 2 es la tercera más grande de las cinco capas que componen la primera versión de la constelación Starlink de 4408 satélites. Una vez lanzada, la misión Starlink Grupo 2-4 aumentará el número total de satélites Starlink lanzados a 3610. Estos satélites operarían en las bandas Ku y Ka.
Fuente: SpaceX