Tras el exitoso lanzamiento inaugural del cohete New Glenn, Blue Origin anuncia la reducción del 10% de su fuerza laboral, una medida destinada a optimizar la estructura interna y agilizar la producción en una fase de rápida expansión.
Blue Origin, la empresa aeroespacial fundada por Jeff Bezos, ha anunciado la reducción del 10% de su fuerza laboral, afectando a aproximadamente 1.400 empleados. La decisión se produce un mes después del exitoso lanzamiento inaugural de su cohete New Glenn, que alcanzó la órbita en su primer intento.
El director ejecutivo de Blue Origin, Dave Limp, comunicó la noticia a los empleados y explicó que la rápida expansión de la compañía en los últimos años había generado una burocracia excesiva y una menor eficiencia operativa. Según Limp, estos recortes son necesarios para agilizar la producción y aumentar la frecuencia de los lanzamientos.
La reestructuración impactará diversas áreas, entre ellas ingeniería, investigación y desarrollo, la gestión de programas y proyectos, así como cargos de mandos intermedios. A pesar de los despidos, Limp subrayó que la empresa continuará invirtiendo en áreas estratégicas y contratando personal en posiciones críticas para alcanzar sus ambiciosos objetivos, como el aterrizaje en la Luna y la realización regular de vuelos con los cohetes New Glenn y New Shepard.
Esta medida se enmarca en una tendencia más amplia dentro de la industria aeroespacial, en la que las empresas buscan optimizar sus estructuras organizativas para reducir la burocracia y mejorar la eficiencia. Asimismo, otros gigantes tecnológicos, como Amazon y Meta, han implementado estrategias similares para mantenerse competitivos en el mercado.
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