Esta madrugada la agencia espacial de China (CNSA) regresa a la Luna con la misión Chang’e-6, realizando el primer intento de recolectar muestras de un sitio en la cara oculta, cerca del Polo Sur lunar. De resultar exitosa, será la primera misión en la historia de recolección de muestras en el lado oculto de la Luna. El lanzamiento se produjo a bordo de un lanzador Larga Marcha 5 desde Wenchang, China.

Chang’e 6 es la segunda misión de retorno de muestras de suelo lunar de China similar a Chang’e 5, que se lanzó a finales de 2020. Se espera que la sonda espacial traiga a la Tierra una muestra de suelo lunar con una masa de hasta a dos kilogramos. El módulo de aterrizaje aterrizará en la cara oculta de la Luna, cerca del borde sur de la Cuenca Apolo. Si se mantiene este objetivo, sería la primera muestra de suelo de esta cara regresada a la Tierra, porque las misiones Apolo y Luna siempre trajeron muestras de la cara visible de la Luna.

Chang’e 6 es parte del programa chino de exploración lunar Chang’e. La misión sigue a los orbitadores Chang’e 1 (lanzados en 2007) y 2 (2010) y a los rovers Chang’e 3 (2013) y 4 (2018), así como a la misión Chang’e 5.

La sonda espacial de 8,2 toneladas está compuesta por cuatro módulos: un módulo de servicio que apoya el viaje entre la Tierra y la Luna, un módulo de aterrizaje con una masa de 3,8 toneladas para aterrizar en la Luna, una etapa de ascenso que debe traer de regreso las muestras de suelo. a la órbita lunar y una cápsula de retorno que los traerá de regreso a la Tierra.

El cronograma de retorno de muestras consta de una primer etapa de ascenso, que en lugar de regresar directamente a la Tierra (tal como han hecho las sondas soviéticas del programa Luna), tiene un acoplamiento con el módulo de servicio: luego la muestra se transfiere a la cápsula de retorno, que se acerca a la Tierra y se separa de ella para realizar un reingreso a la atmósfera.

Dado que la cara oculta de la Luna no puede comunicarse directamente con la Tierra, es necesario establecer un «Corredor de Información Tierra-Luna» en el espacio. El satélite de retransmisión Queqiao-2, responsable de esta misión, fue lanzado en marzo y completó con éxito la prueba de comunicación en órbita, a la espera de la llegada del Chang’e-6.

 La cara oculta de la Luna es generalmente más antigua que la cara frontal de la Luna y tiene un importante valor de investigación científica. Según el académico Yu Dengyun, diseñador jefe de la cuarta fase del proyecto de exploración lunar de China y subdirector del Comité de Ciencia y Tecnología de la Corporación de Ciencia y Tecnología Aeroespacial, el área de aterrizaje y muestreo preseleccionada para la misión Chang’e-6 es la Cuenca Aitken del Polo Sur en la cara oculta de la Luna, con miras a descubrir y recolectar muestras de diferentes regiones. Los diferentes tipos de muestras lunares mejoran la comprensión humana de la Luna. Una vez que la misión complete el muestreo y los regresos, los científicos estudiarán las muestras, analizarán la estructura, las propiedades físicas, la composición del material, etc. del suelo lunar, y profundizarán el estudio de la historia de formación y evolución de la luna.

Instituciones extranjeras, incluida la CNES, la agencia espacial francesa, proporcionarán varios instrumentos científicos a la sonda. La misión Chang’e-6 lleva cuatro proyectos de lanzamiento internacionales, incluido el analizador de iones negativos de la superficie lunar de la ESA, un detector de radón lunar francés, un reflector láser de esquina italiano y un CubeSat paquistaní.