La NASA sigue luchando para mantener sus programas lunares en marcha, bajo un ajustado presupuesto de $25.4 mil millones dólares que permanecerá fijo hasta 2025, según el presupuesto dictado en 2023 por el congreso de EE.UU.
Debido a esto, la NASA enfrentó decisiones difíciles a principios de este año, recortando mil empleos y cancelando programas con vistas a priorizar la financiación del programa Artemis y su aterrizaje lunar en 2026.
El recorte llegó al punto de hacer que la NASA no pueda costear el lanzamiento de un rover lunar que ya logró fabricar. La agencia ha gastado 450 millones de dólares diseñando y construyendo el rover VIPER para conducir en cráteres en el polo sur de la Luna, pero anunció a principios de este mes que cancelará el rover debido a retrasos y sobrecostos.
La misión estaba programada para lanzarse a finales de 2024 con la esperanza de responder algunas de las muchas preguntas sobre la ubicación de hielo de agua y otros recursos en la Luna. Las agencias internacionales y los socios comerciales tienen hasta el 1 de agosto para presentar a la NASA un plan para usar el rover intacto. Si no hay interesados, la agencia planea desmantelar el rover y utilizar sus componentes en otras misiones.
En respuesta, desde ingenieros hasta entusiastas del espacio, firmaron una carta la semana pasada liderada por la Sociedad Planetaria pidiendo a los legisladores que reincorporen el programa al presupuesto de la NASA. La carta alude a la importancia científica del programa y al costo hundió de la inversión ya realizada para fabricar el rover. Señala que la NASA pretende gastar otros 323 millones de dólares para lanzar un «simulador de masa» inerte, como un pisapapeles lunar, en lugar de seguir adelante con la misión.
«VIPER sigue siendo una parte clave de la hoja de ruta de los Estados Unidos para regresar a la Luna. Sin él, los Estados Unidos corren el riesgo de perder su posición líder en la exploración lunar,» dice la carta. «Los riesgos para otras misiones de la NASA, incluido el regreso de astronautas a la Luna como parte del programa Artemis, también aumentan debido a la pérdida de conocimientos sobre el terreno y las propiedades del polo sur lunar».