El pasado martes 20 de diciembre, la ministra de Comunicaciones y Tecnología de la Información de Irán, Isa Zarepour, anunció que los satélites de telecomunicaciones Nahid-1 y Nahid-2 de fabricación nacional se pondrán en órbita en marzo de 2023. Según la agencia de noticias estatal iraní IRNA, Zarepour agregó que «otros satélites también están en línea para ser lanzados».
El satélite Nahid-1 fue encargado por la Agencia Espacial Iraní al Centro de Investigación Espacial Iraní y será operado por el Ministerio de Comunicaciones y Tecnologías de la Información. Es un microsatélite con una masa de 40 kg diseñado para operar en órbita baja (LEO). Por su parte, el satélite Nahid-2, de 110 kg, es una versión mejorada del satélite Nahid 1. Según se informa, este satélite se lanzará a una órbita baja de 500 km y tendrá una vida útil de 2 años.
En febrero de 2017 se presentó el satélite de telecomunicaciones Nahid-1 con fecha estimada de lanzamiento en agosto de 2019. Sin embargo, según informes de distintos medios e imágenes satelitales de la agencia de noticias NPR que mostraban humo saliendo de la plataforma de lanzamiento en el Centro Espacial Imam Khomeini, Irán no pudo lanzar el satélite.
Según declaraciones realizadas a principios de este mes por el comandante de la División Aeroespacial del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI), Amir Ali, el satélite se pondrá en órbita utilizando el lanzador de combustible sólido Qaem 100. El lanzador Qaem 100, el primero de su tipo fabricado por científicos iraníes, es capaz de poner en órbita satélites de hasta 80 kilogramos a 500 kilómetros de la superficie terrestre. El motor de primera etapa de combustible sólido del vehículo, que había sido sometido a pruebas en tierra a principios de este año, completó su primer vuelo espacial suborbital el 5 de noviembre.
Mientras tanto, el 14 de diciembre, la Agencia Espacial Iraní (ISA) y su contraparte rusa, Roscosmos, firmaron un memorando de entendimiento para cooperar en la construcción de satélites e infraestructura relacionada. El acuerdo prevé la cooperación en la construcción de satélites de teledetección y satélites de comunicaciones, así como infraestructura para el montaje, lanzamiento y prueba de satélites.