Iridium Communications comunicó los resultados del tercer trimestre y de los nueve meses finalizados el 30 de septiembre de 2023. En el tercer trimestre, la empresa registró ingresos por USD 197,6 millones, frente a los USD 184 millones de hace un año. La pérdida neta fue de USD 1,64 millones, evidenciando una reducción del 23,8% con relación al ejercicio previo.

La pérdida básica por acción de las operaciones continuadas fue de USD 0,01, marcando una reducción del 50% anual.  En lo relativo a la facturación durante los nueve meses de 2023, los ingresos fueron de USD 595,9 millones, denotando un alza del 8% respecto al ejercicio previo. No obstante, la pérdida neta fue de USD 22,6 millones, frente a los USD 9 millones reportados en septiembre de 2022.

La perspectiva negativa empezó a teñir la hoja de balance de la firma y, más precisamente, la cotización de la acción debido a que la firma Qualcomm anuló el contrato que tenía con Iridium del que provenía no menos del 5% de su facturación. La asociación pretendía llevar los servicios de mensajería y emergencia por satélite a los teléfonos inteligentes equipados con plataformas móviles Snapdragon, con el apoyo de la red de satélites de Iridium. Aunque la tecnología tenía altos estándares de calidad, no ha sido incluida por las marcas líderes. En tal sentido, la empresa afirmó que buscará nuevas relaciones con fabricantes de equipos originales, fabricantes de chips y desarrolladores para sus planes de servicio.

Para el cierre de 2023, el mercado prevé ventas por USD 790 millones, 9,6% más que el ejercicio anterior. En tanto, pese a una ralentización en el costo de insumos, el margen bruto tuvo una caída de 5,8% interanual al totalizar los USD 489,9 millones. A ello se le debe sumar una estructura de gastos que viene creciendo hace dos años a tasas de dos dígitos.

Si bien el EBITDA trepa desde los USD 424 millones hasta los USD 462,9 millones, el crecimiento del capital de trabajo y diversas erogaciones provocaron un mayor endeudamiento de la firma a valores similares a la etapa de pandemia. En este aspecto, la cuenta de intereses escaló un 23,2% al llegar a los USD 83 millones, lo cual sumado al desplome del flujo de caja, producto de pasar de un superávit de USD 8,7 millones a un déficit de USD 20,9 millones, deja en una posición endeble de cara al ejercicio 2024.

A juzgar por la evolución de la acción, será un fin de año complicado para la firma en tanto no pueda dar luz a como recuperará el flujo perdido ante la caída del contrato con Qualcomm.

Proyección histórica de ingresos – actual y estimado (en mm usd)

Autor: Daniel Miliá. Magister en Gestión Económica y Financiera de Riesgos Especialista en Mercado de Capitales. Lic. En Economía. Autor de libros y artículos de finanzas y mercado de capitales. Conferencista nacional e internacional.