La empresa estatal china SAST realizó la primera prueba de vuelo de un vehículo de lanzamiento reutilizable. La prueba constó del despegue y aterrizaje vertical a 10 kilómetros de altura de un cohete desarrollado por SAST, la Octava Academia de la Corporación de Ciencia y Tecnología Aeroespaciales de China (CASC).

La prueba completa duró unos 6 minutos. Según informó CASC desde medios oficiales, en el Centro de Lanzamiento de Satélites de Jiuquan se instaló en la plataforma de lanzamiento un cohete de verificación de nueva tecnología de vehículo de lanzamiento reutilizable de 3,8 metros de diámetro.

Se encendieron tres motores de metano de oxígeno líquido de empuje variable, que emitieron una llama de cola azul y el cuerpo del cohete se elevó a una altitud de unos 12 kilómetros. Luego el cohete descendió de forma controlada, se desplegaron las cuatro patas de aterrizaje a 50 metros del suelo, y aterrizó en el sitio de recuperación.

Esta prueba de despegue y aterrizaje vertical fue la del vehículo de lanzamiento reutilizable más grande de China. También es la primera aplicación de un motor de metano de oxígeno líquido de empuje variable de profundidad desarrollado de forma independiente en un vuelo de regreso de diez kilómetros.

La prueba verificó la estructura del cuerpo del cohete de 3,8 metros de diámetro, la tecnología de amortiguación de aterrizaje, la tecnología de motor reutilizable, la tecnología de transporte presurizado dual de baja temperatura, la guía de navegación de alta precisión y la tecnología de control para el regreso. Se espera que la información recabada permita avanzar en pruebas de un lanzador reutilizable de 4 metros de altura para 2025.  

El cohete funciona a base de un motor de metano y oxígeno líquido, aprovechando el costo relativamente bajo de la producción de metano para escalar en la comercialización del servicio. A su vez, los propulsores de oxígeno líquido y metano a baja temperatura solo producen agua y dióxido de carbono después de una combustión completa, lo que reduce el impacto ambiental y favorece la reutilización.

El sistema de amortiguación de aterrizaje es la clave para el aterrizaje suave de un cohete. Los amortiguadores en las cuatro patas de aterrizaje pueden absorber la energía cinética y potencial del cuerpo del cohete cuando aterriza, permitiendo que el cohete aterrice suavemente.