El grupo L3Harris Technologies anunció este viernes que completó la adquisición de Aerojet Rocketdyne, formando el cuarto segmento comercial en la empresa. L3Harris firmó el acuerdo definitivo por 4700 millones de dólares para comprar el fabricante de sistemas críticos de propulsión en diciembre de 2022.

Aerojet fabrica productos de propulsión de combustible líquido y sólido para los principales actores espaciales y fabricantes de misiles. Sus programas espaciales clave incluyen los motores RS-25 de SLS, el motor principal de la nave espacial Orion, el RL-10, y productos de propulsión eléctrica en el espacio. Con sede en California, EE. UU., la compañía genera aproximadamente 2.300 millones de dólares en ingresos anuales y cuenta con aproximadamente 5 mil empleados que ahora forman parte de L3 Harris.

L3Harris, con sede en Melbourne, Florida, es una empresa aeroespacial y de defensa mundial con ingresos anuales de 17.000 millones de dólares y más de 50 mil empleados. La adquisición de Aerojet le daría a L3Harris una mayor presencia en el espacio civil, los sistemas de defensa estratégica y las municiones de precisión.

Como el último proveedor estadounidense independiente de sistemas de propulsión para misiles tácticos, Aerojet ha sido objeto de distintos intentos de adquisición durante los últimos dos años, en el marco de un proceso de consolidación de las empresas de la industria aeroespacial y de defensa. El acuerdo luego de dos años del intento del grupo Lockheed Martin por comprar Aerojet Rocketdyne a través de una oferta de 4.400 millones de dólares que fue bloqueada por los reguladores antimonopolio de EE. UU. a principios de 2022.

La adquisición diversifica la cartera de L3Harris, agregando una acumulación considerable de ciclo largo y le permitirá captar oportunidades en sistemas de defensa antimisiles, hipersónicos y motores de cohetes avanzados, entre otras áreas.

Por su parte, los ejecutivos de Aerojet han argumentado que la empresa necesita más recursos financieros para invertir en tecnologías de próxima generación y que estaría en mejores condiciones de hacerlo como parte de un contratista de defensa más grande que como una empresa independiente.