Este lunes 9 de enero, el primer lanzamiento del proveedor de lanzamientos Virgin Orbit desde el Reino Unido no logró alcanzar la órbita prevista y terminó en fracaso. La empresa provee servicios de lanzamiento a través de aviones que en vuelo lanzan cohetes en orientación horizontal. La misión de este lunes, denominada «Start Me Up» fue la sexta misión del lanzador LauncherOne para la compañía, y la primera en volar desde un lugar que no sea el puerto aéreo y espacial de Mojave, en California, EE. UU.
El avión Boeing 747 de Virgin Orbit despegó de Spaceport Cornwall en el suroeste de Inglaterra alrededor de las 5:02 p.m. horario este. Luego de publicar un tweet erróneo, eliminado posteriormente, sobre haber alcanzado la órbita, el equipo de Virgin Orbit dio la noticia por Twitter:
Según el comunicado de prensa de la compañía, la anomalía se produjo durante el vuelo de la segunda etapa del cohete cuando viajaba a 17.700 kilómetros por hora, menos de dos tercios de la velocidad orbital, pero no ofreció más detalles sobre el problema.
“La naturaleza de primera vez de esta misión agregó capas de complejidad que nuestro equipo manejó profesionalmente; sin embargo, al final parece que una falla técnica nos impidió entregar la órbita final”, declaró Dan Hart, director ejecutivo de Virgin Orbit, en el comunicado.
La misión Start Me Up transportaba nueve pequeños satélites que el cohete desplegaría en una órbita heliosincrónica (SSO) a unos 555 kilómetros de altitud. El lanzamiento fue contratado por la Oficina Nacional de Reconocimiento de EE. UU., con la carga útil principal de un par de cubesats llamados “Prometheus-2” construidos por el Laboratorio de Ciencia y Tecnología de Defensa (DSTL) del Ministerio de Defensa del Reino Unido. Además, el satélite transportaba las siguientes cargas útiles:
- Un par de cubesats llamados CIRCE desarrollados por DSTL y el Laboratorio de Investigación Naval de EE. UU.
- Un cubesat de demostración de tecnología de navegación, llamado DOVER, construido por la empresa británica Open Cosmos.
- ForgeStar-0, el primer satélite de Space Forge, una start-up de fabricación de sistemas espaciales con sede en Gales.
- IOD-3 AMBER, el primero de una constelación de satélites de reconocimiento de dominio marítimo para la empresa británica Horizon Technologies.
- El cubesat de imágenes STORK-6 para la empresa polaca SatRevolution;
- AMAN, el primer cubesat para el gobierno de Omán.
La misión tuvo un alto perfil porque fue el primer intento de lanzamiento orbital que tuvo lugar desde el Reino Unido, parte de una estrategia del gobierno británico para desarrollar una incorporar capacidades de lanzamiento a su incipiente industria espacial. A la vez, la misión representa un revés importante en los intentos del grupo Virgin por aumentar su tasa de lanzamientos ante complicaciones originadas en problemas financieros de la compañía durante los últimos años.