Chang Guang, un operador satelital chino, anunció recientemente que ha realizado con éxito un experimento de comunicaciones láser espacio-tierra de alta velocidad utilizando un satélite de observación terrestre Jilin-1.

Chang Guang Satellite Technology es una empresa estatal con sede en Changchun, provincia de Jilin. Opera una de las constelaciones de observación terrestre más grandes del mundo, llamada Jilin-1, que cuenta con 108 satélites lanzados. El objetivo de China es implementar la comunicación láser en Jilin-1 y otras constelaciones de satélites comerciales para mejorar el rendimiento de los datos y resolver los problemas de congestión en las estaciones terrestres.

El satélite Jilin-1 MF02A04 y el sistema de tierra láser desplegado por el Instituto de Investigación de Información Aeroespacial de la Academia de Ciencias de China lograron establecer una comunicación láser de satélite a tierra de 10 Gbps. Esta velocidad de enlace descendente superó el récord anterior de 1 Gbps utilizando conexiones de radiofrecuencia.

Las frecuencias más altas utilizadas en la comunicación láser permiten una transmisión de datos significativamente más rápida en comparación con las ondas de radio tradicionales. Los dispositivos de comunicación láser también suelen ser más pequeños y ligeros que las herramientas heredadas de radiofrecuencia. Sin embargo, la tecnología láser presenta algunos desafíos, especialmente en lo que respecta a la cobertura de nubes, ya que una cantidad excesiva de nubes puede afectar la conexión con las estaciones terrestres.

En los Estados Unidos, la NASA también está desarrollando su propia comunicación láser de muy alta velocidad entre satélite y tierra. Su misión Pathfinder Technology Demonstrator 3 (PTD-3) logró una velocidad de enlace descendente de 200 Gbps en mayo. Se espera que esta tecnología de comunicación láser se integre con la nave espacial Orion de Artemis II para proporcionar transferencias de datos de alta velocidad desde la Luna.