El pasado martes 10 de enero la start-up estadounidense Lynk Global, que busca brindar servicios de conectividad satelital directa a celulares, anunció que ha desplegado con éxito sus dos satélites lanzados el pasado 3 de enero en la misión de vuelo compartido Transporter-6 de SpaceX. Asimismo, anunció que se está preparando para comenzar a ofrecer el servicio comercial “direct-to-cell» en “unos pocos meses”.
A través del comunicado, el CEO de Lynk declaró: “Este lanzamiento amplía el liderazgo de Lynk en la categoría de satélite directo a celulares estándar. Mientras que otros acaban de darse cuenta de que el satélite directo al teléfono es un tema importante, nosotros inventamos y patentamos la tecnología en 2017, comenzamos a probar la tecnología en el espacio en 2019 y ahora tenemos tres torres comerciales de telefonía móvil satelital en espacio”. Y agregó: “Estamos años por delante de todos los demás”.
El segmento de conectividad satelital directa a celulares (también llamado “direct-to-cell”) ha sido el centro de mucha atención durante los últimos meses. En particular, se destacan acuerdos entre grandes empresas: T-Mobile US y Starlink, Globalstar y Apple (que activó su función de comunicaciones de emergencia por satélite en noviembre de 2022) y, más recientemente, Qualcomm, que anunció su asociación con la operadora Iridium para dar conectividad satelital a celulares Android mediante su chip Snapdragon.
Los planes de Lynk Global incluyen desplegar una constelación comercial de 10 satélites que actúen como “torres celulares” en órbita baja (LEO). Luego de haber lanzado un satélite de prueba en 2021 (Link 06 o “Shanon”) y el primer satélite operativo de la constelación en 2022, Lynk 05 (o “Link Tower 01”), con el lanzamiento el pasado 3 de enero la empresa sumó los satélites Link 08 (“Lynk Tower 03”) y Link 09 (“Link Tower 04”), totalizando tres satélites operativos de una constelación planificada de diez.
Desde septiembre de 2022, la empresa tiene permiso del ente regulador de telecomunicaciones en EE. UU., la FCC, para operar en bandas que van desde 617-960 MHz (para transmisiones del espacio a la Tierra) y 663-915 MHz (para transmisiones desde la Tierra al espacio) con estaciones terrestres fuera de los Estados Unidos, así como seguimiento y control en 20 y 30 GHz y en la banda de 2 GHz. Esta autorización le permitiría a la empresa brindar conectividad satelital a dispositivos GSM y LTE existentes fuera de los EE. UU., a través de asociaciones con operadores de telefonía móvil (MNO) en lugar de un servicio directo al consumidor.
Lynk declaró que ya tiene acuerdos comerciales con 25 operadores de redes móviles en 41 países y que está «probando activamente conexiones de satélite a teléfono estándar en 17 países en los siete continentes». Asimismo, la solicitud presentada a la FCC señala que los 10 satélites de Lynk “brindarán servicio como máximo al 6 % del mundo y durante no más de 90 minutos no consecutivos por día en cualquier ubicación en particular.”