Este jueves, la operadora estadounidense Viasat, que este año agregó a su flota los satélites de Inmarsat tras concretar un proceso de adquisición, anunció que el satélite Inmarsat-6 F2 sufrió una anomalía del subsistema de energía durante su fase de elevación de la órbita. El anuncio se realiza pocos meses después de una que falla en el satélite de muy alto rendimiento Viasat-3 afectara las previsiones de crecimiento para la operadora estadounidense. El satélite I6-F2 estaba programado comenzar su servicio en 2024.
Según un comunicado de la compañía, el satélite Inmarsat-6 F2 (I6 F2), que fue lanzado el 18 de febrero de 2023, sufrió una anomalía del subsistema de energía durante su fase de elevación hacia su órbita designada a 36.000 km sobre el ecuador con una inclinación de 28° Oeste. En esta etapa, Viasat y Airbus, el fabricante del satélite, están trabajando para determinar la causa raíz de la anomalía y evaluar si el satélite podrá realizar su misión.
El satélite fue construido por Airbus, pesa alrededor de 5500 kg y está equipados con una carga útil híbrida de banda Ka y banda L para proporcionar principalmente servicios de conectividad móvil en los mercados marítimo, de aviación y gubernamental. A raíz del anuncio sobre la falla, Airbus declaró que esta anomalía es un hecho sin precedentes, en tanto ninguno de sus satélites geoestacionarios de telecomunicaciones ha sufrido hasta ahora un fallo en órbita.
Según el comunicado de Viasat, la anomalía del I6 F2 no afecta los servicios los clientes en curso, y Viasat prevé que no afectará materialmente las perspectivas financieras de ingresos presentados en su último informe financiero el pasado 9 de agosto. El satélite se encuentra asegurado y el satélite gemelo Inmarat-6 F1 (I6 F1), lanzado en diciembre de 2021, está operativo y sigue funcionando.
Los satélites Inmarsat-6 (I-6) constituyen la sexta generación de satélites para Inmarsat, un operador global de comunicaciones móviles por satélite (MSS) con sede en Londres que fue adquirido este año por Viasat. La serie de satélites I-6 son los primeros satélites híbridos de la compañía, con cargas útiles de comunicaciones de banda ancha de alta velocidad de banda L y banda Ka. Según la compañía, cada satélite duplica la cantidad de capacidad de banda L utilizable en el área de cobertura que hasta ahora Inmarsat proporciona con su red ELERA. Este aumento en la capacidad está destinado principalmente a los servicios de voz y mensajería que Inmarsat brinda a través de teléfonos especializados, así como su negocio de seguimiento y monitoreo remotos. A esta red se espera que se agreguen para 2025 cinco satélites más que según la empresa, ya están financiados.
«La misión inicial del I6 F2 era esencialmente proporcionar banda L adicional y cuatro Gbps de capacidad adicional en banda Ka, consistente con el despliegue y operación de una red redundante y resistente», declaró Mark Dankberg, presidente y director ejecutivo de Viasat, a través del comunicado. Además de los 11 satélites de banda Ka existentes en servicio para la compañía combinada, y su acceso a satélites adicionales de sus socios, Viasat cuenta con siete satélites de banda Ka más en construcción, que la compañía anticipa sostendrán y mejorarán su negocio de movilidad.